Para ser controlador aéreo se requiere un elevado nivel de inglés y un minucioso certificado médico. Hasta octubre del 2009 se requería un título universitario, pero una directiva europea que entró en vigor eliminó esa condición, rebajó la edad de acceso al trabajo de los 21 años a los 18 y permitió que los controladores europeos pudiesen trabajar en cualquier país de la UE. El curso de formación dura 15 meses. Antes, los aspirantes han de pasar unas prueba sobre conocimientos aeronáuticos, resistencia a la fatiga y al estrés y estabilidad emocional.