El Gobierno dio ayer luz verde al anteproyecto de ley para la reforma del divorcio, que elimina el trámite de separación y posibilita compartir la custodia de los hijos. Según el titular de Justicia, Juan Fernando López Aguilar, la reforma también se aplicará a los más de 200.000 procesos pendientes de resolución.
La simplificación del proceso que establece la norma, que entrará en vigor en el 2005, supondrá, según el ministro, una reducción de más del 50% en los costes económicos y, "sobre todo, en los costes procesales, emocionales, personales y también morales".
El coste se reducirá por la simplificación
Los colegios de abogados anuncian como cifra orientativa para separaciones o divorcios de mutuo acuerdo un precio de 900 euros y de 1.500 para los contenciosos. Pero, según las asociaciones de consumidores, en la práctica una ruptura de mutuo acuerdo tiene un coste mínimo (entre los 1.200 y los 3.000 euros), que se duplica --sin contar los recursos-- si no hay pacto previo. Se calcula que las rupturas mueven al año en España al año 350 millones de euros (58.000 millones de pesetas).
La reducción del coste, según explicó López Aguilar, vendría al evitarse en un buen número de procesos la duplicidad de gastos, por un lado, para obtener la separación y, por otro, el definitivo divorcio.La ley será aplicable a todos los pleitos
La reforma del divorcio será aplicable a los más de 200.000 procesos que actualmente se encuentran pendientes de resolución en los juzgados españoles. Sólo el pasado año se tramitaron 126.742 demandas de separación y divorcio en todo el territorio español.
El titular de Justicia explicó ayer que para dar respuesta a la situación y beneficiar al máximo número posible de afectados, la norma establece en una disposición transitoria que será de aplicación a todos los pleitos que se encuentren en curso.
Quienes ahora estén a la espera de una sentencia de separación, cuando entre en vigor la ley podrán pedir que se cambie directamente por una de divorcio.No hay necesidad de pedir la separación
Según explicó la vicepresidenta del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, la reforma pretende acabar con el hecho de que la disolución matrimonial tenga que ser consecuencia de de separaciones previas de los cónyuges de hasta dos años y elimina también las causas que habitualmente tienen que alegar las personas que presentan la demanda. También se elminirá la necesidad de tener que alegar motivo alguno para iniciar la demanda de divorcio. "Nadie pregunta por qué se casan, nadie debe preguntar por qué se divorcian", razonó De la Vega.
La nueva legislación hará que los procesos judiciales por ruptura matrimonial se reduzcan en un 30%, según estimaciones de la Asociación Española de Abogados de familia.Se podrá dar dinero de una sola vez
El anteproyecto de ley prevé que la pensión compensatoria al cónyuge que resulte perjudicado por la ruptura puede ser vitalicia o mediante el pago de un porcentaje de los ingresos o del patrimonio durante un tiempo delimitado. También se podrá abonar una cantidad global en una sola entrega. La ley actual no incluía esta especie de liquidación.
El Ministerio de Justicia considera que esta posibilidad de sustituir la pensión por un dinero que se entrega de una vez permitirá evitar muchas disputas.
