Un empresario británico ha ofrecido una recompensa de un millón de libras (1,4 millones de euros) por información que pueda dar con el paradero de la niña Madeleine McCann, desaparecida el pasado 3 de mayo mientras dormía en un hotel de Lagos, en El Algarve portugués. El diario "The Times" informa hoy de que Stephen Winyard, dueño del gimnasio Stobo Castle, en Peebleshire (Escocia), decidió ofrecer la suma de dinero tras leer el caso en la prensa y observar la angustia de los padres de Madeleine, quien mañana cumplirá 4 años.

La desaparición de la pequeña ha acaparado la atención de los medios de comunicación británicos. Según el citado periódico, la propuesta ha sido comunicada a la familia McCann en Portugal, pero aún se desconoce si las leyes portuguesas permiten que la recompensa sea difundida a la población. Winyard, de 57 años, vive en Mónaco y es padre de tres hijos de entre 8 y 15 años.

"Cuando vi los rostros (de los padres) sentí frustración de que nadie haya ofrecido una recompensa considerable (por la niña) y sentí que tenía que hacer algo", dijo el empresario. "Espero que esto ayude y lleve a su rescate y los arrestos de los responsables", afirmó Winyard. Hasta el momento no hay información sobre la suerte de la menor, quien desapareció de la habitación en la que dormía con sus dos hermanos gemelos de 2 años mientras sus padres cenaban en un restaurante cercano en un complejo turístico en Praia da Luz.

La Policía portuguesa revisa imágenes de las pantallas de circuito cerrado de seguridad tomadas en distintos lugares en busca de pistas que puedan dar con el paradero de la menor. Según los medios británicos, una de las cintas corresponde a imágenes de una estación de servicio cerca de Praia da Luz y en las que se ve a una mujer con una niña.

Al parecer, una de las teorías sobre la que trabaja la Policía es que Madeleine pudo ser raptada por dos hombres y una mujer. La Policía y numerosos voluntarios han tratado, sin resultado, de encontrar alguna pista que permita encontrar a la niña. En diversos medios portugueses ha trascendido la sospecha de que el secuestro de Madeleine está relacionado con redes de pederastia o de adopción ilegal.