El Papa anunció ayer que el 24 de octubre se celebrará el nuevo consistorio para el nombramiento de 31 nuevos cardenales, adelantándose casi en cinco meses a la fecha prevista. El próximo consistorio estaba previsto para febrero del 2004, pero Juan Pablo II, con una salud cada vez más deteriorada, aprovechó el Angelus del domingo para hacer públicos los nombres de los nuevos cardenales, con lo que quedará conformado el Colegio Cardenalicio del que puede salir su sucesor.

Desde una ventana de sus dependencias, el Papa leyó, con voz débil y cansada, los nombres de los 31 elegidos, entre ellos los españoles Julián Herranz, presidente del Colegio Pontificio para la Interpretación de los Textos Legislativos, y el arzobispo de Sevilla, Carlos Amigo Vallejo.

Actualmente existen 164 cardenales. De éstos, sólo 109 tienen derecho al voto, al no superar los 80 años. Con los nuevos nombramientos, 26 con derecho al voto, 4 con más de 80 años, y unos in pectore los electores llegarán a 135, 15 más del número máximo de cardenales establecido para participar en un cónclave.

Entre los elegidos que recibirán el anillo cardenalicio se encuentran 4 de la curia romana, 16 titulares de las diócesis y 4 eclesiásticos. En total, 12 europeos, 3 africanos, 3 de Norteamérica, 2 de Suramérica, 3 asiáticos, y uno de Centroamérica y Oceanía.

De los dos cardenales españoles, Julián Herranz Casado será el nuevo representante del Opus Dei en el colegio cardenalicio. Nació en Baena (Córdoba) en 1930 y fue ordenado sacerdote el 7 de agosto de 1955. Es miembro de la Curia romana desde 1960.

Franciscano de 69 años, Carlos Amigo fue ordenado sacerdote en 1960. El Vaticano ha valorado su actividad como arzobispo de Tánger por su trabajo en el diálogo interreligioso y el ecumenismo.