Cinco miembros del clan Los Capitos , entre ellos su jefe, se han entregado en la Comisaría Provincial de la Policía Nacional de Alicante, donde han quedado detenidos por su presunta implicación en el tiroteo que les enfrentó el pasado 20 de noviembre con Los Molis , informaron ayer fuentes policiales.

Con éstas, ya son trece las personas arrestadas por su supuesta participación en esta refriega entre clanes de etnia gitana, que guarda relación, según creen los investigadores del Grupo de Homicidios de la Policía, con la distribución de droga en la zona norte de la ciudad y que se saldó con un balance de cinco heridos, cuatro de bala y uno por atropello.

Según las fuentes, los nuevos detenidos habían huido de Alicante junto con varios familiares "ante el temor de posibles represalias del otro clan" y han decidido entregarse por la presión policial ejercida sobre sus parientes, de los que se sospechaba "que podían estar escondiéndoles".

El suceso se produjo el pasado 20 de noviembre sobre las 14.15 horas entre las calles Diputado Antonio Rodríguez Marín y Luis Gamir del barrio alicantino de Virgen del Carmen, también conocido como Mil Viviendas, cuando integrantes de ambas bandas cruzaron fuego de forma indiscriminada -llegaron a efectuar más de treinta disparos- en un ajuste de cuentas por el tráfico de drogas.

Dos capitos y dos molis resultaron heridos por el impacto de proyectiles, mientras que un joven del barrio fue atropellado por un vehículo en el que huyeron miembros de la primera de las familias.

Los tres últimos fueron trasladados hasta el Hospital de Alicante, donde fueron detenidos por la policía.