Las reformas legislativas se confeccionan a toda máquina para cumplir los plazos prefijados y a veces se queda por el camino la oportunidad de resolver injusticias históricas por un simple olvido. Este parece ser el caso de los permisos de los progenitores de prematuros. La ley no introduce ningún cambio en la legislación que fija la misma duración de la baja que para un parto normal, pese a que muchos prematuros, de poco más de medio kilo, tardan meses en salir adelante.

Los portavoces en la comisión de Trabajo del PSOE, IU-ICV y CiU, interrogados ayer por este diario sobre la cuestión, reconocieron que no cayeron en la cuenta de incluir esta cuestión en la reforma pero que, en principio, les parecería justo alargar el periodo de baja. La portavoz del PSOE, Mariví Monteseirín, anunció que estudiará su introducción en el Senado, mientras que CiU e IU-ICV, Merc¨ Piguem, y Carme García, se comprometieron a promover que los senadores presenten una enmienda.

La única ventaja para los padres de niños prematuros que establece la actual legislación fue fruto de una propuesta de CiU. La baja puede ser interrumpida a partir de las seis semanas si el pequeño sigue ingresado.