LOS HOTELEROS
El secretario general de la Confederación Española de Hoteles y Alojamientos Turísticos (Cehat), Ramón Estalella, pidió ayer al Gobierno que "sea valiente" y fije durante la huelga unos servicios mínimos que permitan que la actividad aérea continúe o que sustituya a los controladores por personal extranjero o militares. Estalella afirmó que "bajo ningún concepto" se puede aceptar que "un colectivo de dos millares de personas pueda afectar a 12 millones de viajeros y a tres millones de trabajadores, que son los que emplea el sector turístico".
LAS COMPAÑIAS AEREAS
La Asociación de Compañías Españolas de Transporte Aéreo (Aceta), por su parte, tachó la protesta de "injustificada" y denunció que la USCA eche pulsos al Gobierno y ponga a las compañías "en situaciones difíciles". "Los controladores prefieren proteger sus ferraris aun a costa de quitar el pan a 40 millones de habitantes", añadió el dirigente de la mesa del turismo, Félix Arévalo.
LOS DERECHOS
Las organizaciones de consumidores recordaron que los pasajeros "tienen garantizados sus derechos" en caso de retraso o anulación. Yolanda Quintana, portavoz de la Confederación de Organizaciones de Amas de Casa, Consumidores y Usuarios (CEACCU) consideró que "el principal perjudicado" será el usuario.
