Más de 2.000 hectáreas de pinar y monte bajo calcinadas es el balance provisional del incendio forestal que afecta a los montes de Zuera (Zaragoza) que, aunque está más estabilizado, no está controlado y persiste con un nivel de alerta importante.

Un frente "latente" en la zona noreste del fuego con algunas columnas de humo y las altas temperaturas, con máximas que rondarán los 40 grados, son los principales riesgos que existen para que el incendio se complique y avance por este flanco, con una continuidad de la masa forestal tan grande como la quemada hasta ahora.

El viento por ahora es favorable, pero si las condiciones cambiaran en ese flanco habría una situación de "algo riesgo", ha reconocido el consejero de Medio Ambiente del Gobierno de Aragón, Alfredo Boné.

Bone, en una visita al lugar del siniestro, ha conocido de primera mano los trabajos de extinción y ha confiado en que marchen bien los trabajos del operativo, cuyas labores se concentran en esta zona, especialmente la de los medios aéreos, para evitar que se reaviven las llamas y pueda "devenir en un gran incendio".

En la extinción de las llamas intervienen, sin que haya habido ningún contratiempo, casi 300 personas y 16 medios aéreos, además de la Unidad Militar de Emergencia, de la que la Delegación del Gobierno ha pedido más efectivos al Ministerio de Defensa.

El incendio se declaró ayer a causa de un accidente de tráfico en la carretera que une Castejón de Valdejasa con Villanueva de Gállego, que permanece cortada, y por las hectáreas quemadas es probablemente el más importante en lo que va de año de España y el sexto en toda la historia de Aragón desde que existen registros, ha apuntado Boné.

"Estamos hablando de un incendio muy importante" que "no está ni mucho menos controlado", ha afirmado categóricamente el consejero, quien además ha destacado que se trata de una masa forestal "muy frágil" y con una continuidad "compleja".

No obstante, ha insistido en que sí está más estabilizado y que se dará por controlado cuando se tenga "la seguridad plena" de que lo está y, en estos momentos, no lo está y en su opinión no podrá hacerse esa declaración a lo largo del día.

Ha reconocido que las condiciones meteorológicas en Aragón son "muy críticas" (por las altas temperaturas) y un gran incendio como este se puede originar por cualquier accidente, como es el caso, y una vez se ha declarado es "muy difícil de parar".

Por ello, ha reclamado a los ciudadanos, agricultores y ganaderos que extremen las medidas de precaución, ya que las lluvias de mayo no garantizan que no vaya a ser un año "muy malo" de incendios.

Por este fuego no hay que lamentar daños personales ni materiales importantes, salvo alguna granja donde han muerto animales, aunque en Castejón de Valdejasa fueron desalojados ayer de forma preventiva por el humo sus cerca de 300 vecinos, hasta que pudieron regresar a sus casas a medianoche.

Boné ha agradecido a todos los efectivos su colaboración en la extinción de las llamas, con relevos "permanentemente" y una coordinación entre todas las instituciones -Ministerio de Medio Ambiente, Diputación de Zaragoza, comarcas, ayuntamientos y Protección Civil- que, ha asegurado, "está funcionando muy bien".

También ha reconocido la cooperación de los Ayuntamientos de Zuera y Castejón, con los que el Departamento de Medio Ambiente se coordinará para su incorporación al plan de restauración de grandes superficies afectadas por incendios, al que se destinarán hasta el año 2012 trece millones de euros, la misma cantidad que se dedica a en la mejora de los cortafuegos.

En ese sentido, se ha mostrado convencido de que los trabajos de cortafuegos han evitado que sea "mucho mayor" en un monte en el que se ha invertido en los últimos tres años más de un millón de euros.