En calzoncillos y colocándose el paquete. Un fotógrafo pilló casi desnudo y en plena intimidad a David Beckham cuando el capitán de la selección inglesa se asomó a la terraza del hotel donde se aloja en Lisboa. La cámara dejó constancia del superbody que se gasta el ídolo británico, quien por toda vestimenta llevaba un pequeño eslip y unas gafas de sol. Moreno, tatuado y con cada músculo y protuberancia en su sitio, Sexy Becksy, como lo llama la prensa popular londinense, ha puesto muy alto el listón para el título del jugador más macizo de la Eurocopa 2004.

Mientras la tórrida imagen daba imparable la vuelta al mundo, la federación inglesa de fútbol elevaba una inútil protesta, pidiendo que se respete la vida privada de los jugadores.

"Estaba en su habitación y cuando cerró la puerta detrás de él confiaba, con toda razón, en que se respetase su privacidad", dijo una fuente de la federación. Todas las chicas del servicio de habitaciones han sido sustituidas en el recinto hotelero por varones. Recepcionistas y limpiadoras tienen órdenes de mantenerse a distancia de los futbolistas.

RECHAZO AL RECATO La cantante Janet Jackson acusó a la Administración de Bush de magnificar su incidente en la Superbowl --mostró un pecho en una actuación-- para "distraer la atención sobre problemas políticos como la guerra de Irak". Jackson dijo ayer en Santiago, donde rodó un especial del Xacobeo.

FAMILIA APENADA Los príncipes Guillermo y Enrique se desplazaron ayer hasta la Catedral de Santa Columba, en Escocia, para asistir al funeral de su abuela materna, Frances Shand Kydd, que murió la semana pasada por una enfermedad cerebral. El príncipe Carlos de Inglaterra, prefirió el de Ronald Reagan.