LOS 32 HUESOS , datados entre 42.000 y 38.500 años, de los restos del esqueleto de un espécimen básicamente humano descubierto en el 2003 en una cueva de Pekín, demuestran que hubo cruces sexuales entre Homo sapiens y otras especies más arcaicas como los neandertales cuando los primeros comenzaron su expansión desde Africa.