La policía frustró ayer en Zaragoza el viaje que iba a realizar un matrimonio africano a su país de origen para practicar, presuntamente, la ablación del clítoris a su hija menor de edad.

Sobre las nueve de la noche, se recibió en la policía una llamada de dos mujeres pertenecientes a Médicos del Mundo que decían tener información fiable de que una familia de inmigrantes, posiblemente de Gambia, se disponía a viajar a su patria con el objeto de someter a la pequeña a una mutilación genital, una práctica tribal que en España está penada con hasta 12 años de cárcel.

Inmediatamente, la dotación de un vehículo Zeta se personó en la vivienda de los sospechosos y tomó declaración tanto a la menor como a sus padres, tras lo cual éstos recibieron una citación para presentarse en el juzgado de guardia. La menor pasó a estar bajo protección de la Diputación General de Aragón a través de sus servicios para la infancia.

Al parecer, el caso llegó a oídos de los miembros de la ONG Médicos del Mundo a través de unos comentarios realizados por la pequeña.