La Policía Nacional, en coordinación con la policía búlgara, ha liberado a un ciudadano español que fue secuestrado en Varna (Bulgaria) el pasado lunes y ha detenido a dos jóvenes como presuntos autores del secuestro.Según informa la Dirección General de la Policía y la Guardia Civil, la víctima, que colaboraba en calidad de testigo protegido, fue asaltada por unos desconocidos el pasado lunes, quienes le maniataron y le trasladaron a una fábrica, en donde permaneció custodiado por sus captores.Los detenidos son Nikolay P.C. y Rangel R.P., ambos naturales de Varna, aunque las autoridades buscan a otro individuo, de nombre Dian y ex boxeador, que, al parecer, intervino también en el secuestro. Durante el cautiverio el hombre sufrió diversas agresiones físicas por parte de los captores, que amenazaban con acabar con la vida de la víctima si no recibían 2.300 euros.Las investigaciones se iniciaron a raíz de una llamada efectuada el pasado lunes por el propio secuestrado al móvil de su hermano en la que le informaba de los detalles del secuestro, según han detallado los investigadores.La víctima, que colaboraba como testigo protegido en una investigación llevada a cabo por la Brigada de Investigación del Banco de España de la Comisaría General de Policía Judicial, había dado instrucciones a su hermano para que, en el supuesto caso de que le ocurriese algo, se pusiera de inmediato en contacto con la policía española.A través de la puesta en funcionamiento de un dispositivo conjunto,se localizó el lugar exacto en el que se encontraba el secuestrado y se inició el proceso de negociación con los secuestradores, que presionaron y amenazaron con ejecutar al rehén en una hora si no se pagaba la cantidad solicitada.Con el apoyo de los agentes búlgaros y de los servicios de seguridad de la empresa a través de la cual se exigía el dinero, se localizó en el interior de una oficina de esta firma a los dos secuestradores. Uno de ellos fue detenido en ese momento mientras que el otro se dio a la fuga en un coche, aunque tras una persecución también fue arrestado, mientras que el rehén fue liberado.Las autoridades búlgaras están practicando diversas entradas y registros porque el grupo criminal desarticulado puede estar involucrado además en delitos de tráfico de armas y falsificación de moneda.