Sus padres presentaron ayer a Juan ante los medios de comunicación, aunque él, con solo cinco meses, ya está más que acostumbrado a las cámaras. Juan ha sido el primer niño nacido gracias a una novedosa técnica de selección embrionaria, el Embryoscope, que permite hacer un seguimiento intensivo del embrión a través de fotografías tomadas cada 10 minutos.

Este nuevo sistema incrementa en un 20% las posibilidades de embarazo respecto a las técnicas convencionales de fecundación in vitro. Se trata de una incubadora cinematográfica que permite seguir minuto a minuto la observación de los embriones desde el momento de la fecundación hasta su implantación en el útero, un proceso que suele durar alrededor de tres días.

Ana y David, los padres del bebé, acudieron al Instituto Valenciano de Infertilidad (IVI) en marzo del 2009. Después de tres inseminaciones artificiales infructuosas, decidieron optar por la fecundación in vitro. Tampoco entonces lo consiguieron a la primera, pero su segundo intento, en septiembre del mismo año, coincidió con la puesta en marcha del Embryoscope. De los seis embriones que fueron incubados, dos se transfirieron a la madre. El pasado 4 de junio, Juan nacía en el hospital Obispo Polanco de Teruel.

EN OTROS HOSPITALES El Embryoscope permite una observación más detenida y continuada del embrión sin tener que manipularlo. Antes, los médicos se veían obligados a sacarlo de la incubadora una vez al día para observarlo, un proceso que solo podía durar unos segundos, a riesgo de perjudicar al hipotético futuro bebé.

Las mejoras que incorpora este nuevo método, considerado revolucionario, repercuten en un mayor número de embarazos llevados a término. De momento, ya son nueve los bebés que han nacido gracias a este sistema. Juan fue el pionero, pero pronto tendrá muchos otros compañeros, porque la técnica se está implantando en centros de toda España.

Quizá porque no le venía de nuevo, el pequeño Juan se mostró ayer tranquilo y relajado en todo momento ante las cámaras y los flases. Su madre, que lo llama Juan el deseado, explicó que es un niño "muy risueño y cariñoso" y dijo estar "orgullosa" de que su hijo haya sido el primero en beneficiarse de esta técnica y se alegró de que muchas mujeres "vayan a poder realizar sus sueños" gracias al avance que supone para la fecundación in vitro. Algo parecido opina asimismo José Remohí, presidente del IVI, quien aseguró que esta tecnología es ni más ni menos que "el futuro".