La tradición que existe ya en muchas ciudades de liberar, de indultar, a un preso durante la Semana Santa, y que también antaño se vivía en la Pasión cacereña, volverá este año a Cáceres. Lo hará posible la Cofradía de los Ramos, el Cristo de la Buena Muerte y Virgen de la Esperanza, gracias a la cual un preso del Centro Penitenciario de Cáceres verá adelantado el fin de su condena tras procesionar el Martes Santo con el Cristo del Perdón.

"No se trata ni de un indulto, ni un perdón, sino de adelantar la libertad condicional a un preso que esté a punto de obtenerla", matiza uno de los promotores de esta iniciativa. Para ello ya hay un elegido, "un preso que cumple el requisito elegido, que es haber cumplido la tres cuartas partes de su condena, y que ya ha sido propuesto al juez de Vigilancia Penitenciara para que autorice el que se le adelante la puesta en libertad condicional para que participe voluntariamente en la procesión de la Cofradía".

Es todo lo que de momento se conoce del interno del centro penitenciario elegido para su puesta en libertad, que ha cumplido ya tres cuartas partes de su condena, pues nada se sabe de momento sobre la pena total que se le impuso ni porque delito.

Lo que sí esta claro es que, si lo autoriza el juez de Vigilancia Penitenciaria, su puesta en libertad será histórica, pues con él se recuperará en Cáceres una antigua tradición. Cuando esta existía, recuerdan las fuentes consultadas, la cofradía bajaba a la cárcel antigua de Cáceres, donde le esperaba el preso elegido, que desde aquí acompañaba al paso del Cristo del Perdón durante el resto de la procesión. Lo previsto para este año es dirigirse al edificio de la antigua Audiencia Provincial, hoy sede del Tribunal Superior de Justicia de Extremadura (TSJEx), donde tras celebrarse un simbólico acto de indulto continuará la procesión ya con el preso, del que no se sabrá el nombre.

Es por ello que la Cofradía de los Ramos cambiará el itinerario del desfile procesional para llegar a la Audiencia Provincial. Así, saldrá de la iglesia de San Juan y se dirigirá al edificio de la Audiencia, pasando por la plaza Mayor, para desde allí hacer un recorrido por las calles Nidos, Río Verde, la plaza de la Concepción, la calle Moret y San Juan.

Nada más añade el presidente de la Cofradía, José Manuel Martín Cisneros, que emplaza para conocer detalles al acto de presentación oficial, que tendrá lugar el día 14 y al que está prevista la asistencia del presidente del TSJEx, el subdelegado del Gobierno y el director del centro penitenciario de Cáceres.

Con él se hará oficial la recuperación en Cáceres de esta tradición que se vive por Semana Santa en numerosas ciudades, como Burgos, Alicante o Málaga, entre muchas otras, según los historiadores en recuerdo al pasaje bíblico en el que se narra la liberación de Barrabás, el preso que estando en la prisión de la fortaleza de la Torre Antonia, junto con otros dos delincuentes llamados Dimas y Gestas, fue canjeado por Jesús.

En Málaga, donde la tradición de liberar a un preso por la Cofradía de Nuestro Padre Jesús el Rico se remonta a 1759, se dice que rememora el año en que los presos evitaron que un brote de cólera impidiera salir en procesión a la imagen de Jesús El Rico, el Jesús de los encarcelados.