La marea negra del Prestige ya ha llegado a la costa de Francia. Las manchas de hidrocarburo localizadas el pasado martes en varias playas de Las Landas --al suroeste de Francia, entre las localidades de Biscarosse y Mimizan-- proceden del vertido del petrolero, según confirmó ayer la comandancia marítima del Atlántico en Brest. Y lo peor puede estar todavía por llegar. Las autoridades francesas temen que el chapapote localizado sea una avanzadilla de la gran mancha que se encuentra en el Golfo de Vizcaya y que avanza lentamente hacia las playas francesas.

Un portavoz de la comandancia marítima explicó que los resultados de los análisis del fuel recogido en la región de Las Landas --galletas de apariencia blanda y color gris oscuro-- son "unánimes" y confirman que proceden del Prestige .

Los expertos están analizando otras pastillas de hidrocarburo localizadas cerca de la isla de Ré y del cabo Ferret (al sur de Burdeos) para comprobar si también proceden del petrolero hundido. De momento, los bomberos han recibido la orden de peinar el litoral ante la imposibilidad de detectar este tipo de manchas por avión o helicóptero.

OCHO KILOMETROS

Las primeros restos de hidrocarburos fueron localizados el martes en la playa de Naouas, situada al sur de Biscarosse. Las manchas aparecieron diseminadas a lo largo de ocho kilómetros de costa. Los expertos creen que no serán las únicas. El grueso de la contaminación está situado en el Golfo de Vizcaya, en aguas jurisdicionales francesas y a unos 200 kilómetros de la costa. El viento del sur empuja las placas, que tienen un diámetro de entre dos y diez metros y avanzan a más de 40 kilómetros por día.

Se trata de un petróleo "no fresco y emulsionado" de color chocolate. Las autoridades francesas intentan frenarlo por todos los medios antes que llegue a la costa, pero la tarea es difícil porque las "pésimas" condiciones metereológicas impiden por ahora el envío de buques para recoger fuel en alta mar.

La marea negra no ha cogido desprevenidos a los franceses. Unas cincuenta personas --equipadas con mono blanco, mascarilla, palas y cubos-- fueron movilizadas ayer a Las Landas para recoger las bolas de fuel. Los equipos de limpieza contaron con dos máquinas, un rastrillo y un separador. En total, y antes de que la subida de la marea impidiera continuar con la recogida de petróleo, se recogieron cuatro metros cúbicos de fuel mezclado con arena. Con toda probabilidad, la operación tendrá que repetirse durante los próximos días dependiendo de cómo avance el fuel hacia las playas francesas.

RELEVO DE COORDINACION

Si las manchas de chapapote que flotan en el mar continuan acercándose peligrosamente al litoral francés, las autoridades de París relevarán a las españolas en la coordinación de los trabajos que se pusieron en marcha a raíz del plan Golfo de Vizcaya para emergencias marítimas, desarrollado de manera conjunta por España y Francia.

A partir de ahora, aviones franceses se unirán a los españoles en las tareas de localización de manchas en alta mar y los buques españoles succionarán fuel en la zona francesa. Además, España colocará dos nuevas boyas en la zona de la acumulación de manchas para establecer con mayor precisión el desplazamiento de todos los vertidos que salen del Prestige .