LAS TRABAJADORAS del sexo mostraron ayer su desencanto por la decisión de la Cámara de dejar las cosas como están y no regular su actividad como una profesión. El colectivo Hetaria lamentó que no se las haya escuchado y tachó de "paternalista" el informe aprobado ayer por PSOE, PP y CiU, en el que se descarta penalizar a los clientes de las prostitutas.