-- Huidas ... ¿un refugio?

--Es más bien un "no refugio". Todas las huidas suponen, en cierta forma, una derrota, aunque de la mano de ésta venga la salvación. Se huye cuando la realidad nos vence y nos obliga a buscar algo distinto e incierto.

--Una obra para usted muy importante

--Me encuentro satisfecho con su intensidad, con su tono y con su ejecución. Para mí, cada nueva obra implica un deber de superación con respecto a la anterior. Y, por supuesto, es muy importante por la editorial en que está publicada y que abrirá el campo de posibles lectores.

--Si sus poemas cuentan historias diferentes, ¿qué los condena a vivir unidos en una obra?

--El poema, por su propia idiosincrasia material y formal, posee autonomía. Pero no entiendo un libro de poemas o un poemario sin una estructura que le convierta en un todo, con un mensaje definido y un espíritu común.

--¿De qué huye Antonio Reseco?

--De nada y de todo. Huyo de la mediocridad, del hastío, de los falsos profetas y de los best sellers , de los ganapremios, de Belén Esteban y la Patiño, de la falta de humor. En fin, de mí mismo, que es otra forma de descubrirme, al menos, intentarlo.

--Es su sexto libro, ¿qué le quedaba aún por decir?

--Es la duda la que impulsa a buscar y a decir. Todo está prácticamente dicho. Quizá ahora sólo importe cómo decirlo para parecer, si no nuevo, distinto.

--¿Qué aún no ha dicho aún?

--¿La última palabra? Me gusta entregar a la imprenta lo imprescindible. A veces tengo la sensación de haber publicado más de lo que debería, nunca lo contrario. Por mucha necesidad que tenga, publicar debe ser un ejercicio de contención. Algunos autores se harían un gran favor si sus inéditos --muchos o pocos-- no perdieran tal característica, porque debemos saber que a la mayoría de los que escribimos, el mundo no nos está esperando.

--¿Qué pretende con Huidas ?

--Puede deducirse en su conjunto la precariedad del ser humano, la limitación en el ejercicio de su albedrío, la pequeñez de su existencia. Siempre hay algo que puede más que nosotros y que escribe nuestra historia. Qué aterrador ¿no?.

--¿Escribir es desnudar el alma o aliviar el propio ego?

--Quizá aliviar el alma y, desafortunadamente, a veces, el ego, aunque para esto hay que ser muy aficionado y poco pudoroso- O justo lo contrario.

--Viéndolo ¿queda anticuado aquello de poeta y bohemio?

--Anticuado son los estereotipos.Vivimos en un mundo globalizado, interactivo y mestizo. Se puede ser poeta sin ser bohemio y bohemio sin un ápice de lírica.

--Director de banca y de la editorial Littera Libros, ¿vocación más vocación?

--Obligación y vocación, aunque no siempre estén tan delimitados. Mi trabajo a veces me divierte, aunque sea una obligación y la editorial no pocas me obliga, aunque sea una vocación.