Recibir la noticia de que se sufre una enfermedad o una lesión cuya resolución implicará pasar por el quirófano provoca inmediatamente un cierto grado de ansiedad y angustia, ya que se trata del anuncio de que se puede sufrir dolor, alteración de la vida cotidiana, desplazamientos al hospital e inicio de una etapa en la que los médicos estarán presentes.

El estrés emocional que define ese estado de ansiedad aumenta las complicaciones vinculadas a la propia intervención quirúrgica y prolonga la hospitalización del enfermo, asegura el doctor Antonio de Lacy, responsable del área de cirugía gastrointestinal del Hospital Clínic y artífice de un recurso con el que se proponen atenuar el angustioso periodo descrito.

El método son unas gafas que permiten visualizar imágenes en tres dimensiones provistas de información que describe, paso a paso, las dudas de los pacientes y los temores a ellas asociados. La plataforma de educación quirúrgica AIS Channel ha elaborado un programa informático al que se accede descargando una aplicación creada por la misma compañía, que conduce a un decálogo de respuestas a temores cuya escenificación se puede observar a través de las citadas gafas.

UN OBJETO BARATO

El paciente solo tendrá que adquirir las gafas en cualquier almacén, de un precio inferior a 10 euros, y descargar la aplicación, que el Clínic ofrecerá gratuitamente. En su domicilio, el usuario podrá atravesar visualmente los espacios del hospital que visitará cuando vaya a ser intervenido, observará a las enfermeras que amablemente lo recibirán, conocerá los pasos que precederán al proceso quirúrgico e inclusio verá cómo es la habitación del hosptial donde se alojará en su periodo posoperatorio.

"Si reducimos el temor a lo desconocido de los pacientes, se reducirán las complicaciones vinculadas a la intervención", aseguró De Lacy. El menú al que se puede acceder se inicia con la llegada al hospital, las preguntas que se le harán una vez atraviese las puertas del centro, cómo será el registro y la adjudicación de la habitación en la que ingresará horas antes de ser operado y que aspecto tendrá dicho espacio.

La película de realidad virtual proseguirá con la preceptiva visita del cirujano horas antes de que se inicie la intervención, cómo será el traslado al quirófano -en una camilla y suavemente sedado- la entrada a la sala de operaciones y el momento en que el anestesiólogo procederá a inyectar las sustancis adormecedoras, sobre las que se asegura que son completamente seguras. También aparecerá un posible equipo quirúrgico y, por último, cómo será el periodo de recuperación posquirúrgica.