Unas 2.500 personas, según fuentes de Protección Civil, se manifestaron a última hora de la tarde de ayer por el centro de la localidad pontevedresa de Arcade para pedir la libertad de Ana María Ríos Bemposta, retenida en Cancún acusada de transportar munición en su equipaje.

obre las ocho de la tarde, la plaza de la Ostra de Arcade, localidad natal de la joven, comenzó a llenarse de familiares y numerosos vecinos que portaban fotos de Ana María y pancartas con los lemas: Justicia mexicana, libera a Ana o Ana, inocente .

Tras una concentración de unos quince minutos, las personas congregadas comenzaron a recorrer las calles del centro hasta llegar a la peluquería que regenta la joven.

Al frente de la marcha se situaron Pamela Ríos, hermana de la joven; la suegra, Andrea Bouzón, además del presidente de la diputación, Rafael Louzán, y los alcaldes de Pontevedra, Miguel Anxo Fernández Lores, y de Soutomaior, Agustín Reguera.

La hermana de Ana María leyó un manifiesto en el que los vecinos transmitían su solidaridad con Ana María y pedían su libertad. Con signos evidentes de emoción, la joven tuvo que interrumpir varias veces su alocución.

"Estamos contigo porque te conocemos y apreciamos. Eres una persona sencilla y sincera, que estás pasando los peores momentos de tu vida. No estás sola, hasta que vuelvas estamos contigo", dijo la hermana de Ana María.

La suegra contó que lleva dos días sin poder hablar con su hijo, que está con su esposa y afirmó que había recibido la noticia con incredulidad y expreso su confianza en que el lunes o martes la joven quede en libertad.