La Agencia Nacional de Protección de Datos (AEPD) recurrirá la reciente y controvertida sentencia del Tribunal Supremo que eximía a la Iglesia católica de borrar a los apóstatas de sus libros de bautismos. La AEPD, que considera que los magistrados vulneraron el derecho fundamental a la protección de datos e ignoraron tanto la jurisprudencia del Tribunal Constitucional como una directiva de la UE, interpondrá primero un incidente de nulidad ante el propio alto tribunal y, si este no prospera, un recurso de amparo ante el Constitucional.

En el fallo, los jueces del Supremo entendieron que los libros de bautismos no deben considerarse ficheros porque no están informatizados ni son "accesibles a terceros".