La escritora inglesa J. K. Rowling, creadora de Harry Potter, aseguró que los libros protagonizados por el niño mago son "altamente morales", aunque al escribirlos "no quise ni enseñar ni predicar". "Quise representar las ambigüedades de una sociedad donde la intolerancia, la crueldad, la hipocresía y la corrupción abundan, para demostrar mejor lo heroico que es, cualquiera que sea tu edad, luchar en una batalla que nunca se ganará". Se mostró orgullosa de haber recibido el premio de la Concordia, que celebra, dijo, "el hecho de que tantos niños provenientes de condiciones y circunstancias tan distintas hayan elegido acompañar a Harry en sus cinco años en Hogwarts".
