TEtl fotógrafo Francis Villegas dice que cuando más ha de afinar para escoger las fotografías que se publican en este periódico es en Semana Santa. En campaña electoral puede haber algún político que se cele, pero todo tiene arreglo. En Semana Santa, el más mínimo error puede resultar catastrófico. El amor propio de las cofradías es tan elevado, su esfuerzo tan intenso y sus ansias de perfección tan extraordinarias que si Francis publica más fotos de esta que de aquella... ¡Uf!

En esa competencia tan positiva para la Semana Santa cacereña ha irrumpido con singular vigor en los últimos años la Cofradía de la Sagrada Cena y Nuestra Señora del Sagrario, cuyo mayordomo es Serafín Martín, siendo Antonio Rubio el hermano mayor. Su procesión sale en la mañana del Jueves Santo y aunque no sea tan inquietante como la del Cristo Negro, tan impresionante como la del Nazareno ni tan emocionante como la de la Esperanza, lo cierto es que ninguna otra despierta tanto morbo. Todos los años corre el rumor de que no sale porque no hay hermanos de carga suficientes y todos los años acaba recorriendo Cáceres en un desfile espectacular que precisa entre 90 y 125 hermanos de carga en cada turno para portar la Sagrada Cena y entre 42 y 54 hermanas para llevar a Nuestra Señora del Sagrario. Esta procesión es mirada de reojo por muchos puristas, pero lo cierto es que está revolucionando la espléndida Semana Santa cacereña y complicándole más la vida a Francis Villegas.

*Periodista