El consejero de Sanidad, Juan José Güemes, ha afirmado que el cierre cautelar de la clínica madrileña CB Medical, que realizaba abortos voluntarios, se debió a una inspección "rutinaria" de la Consejería que no está relacionada con la investigación a centros de la misma empresa en Barcelona.

Así lo ha indicado hoy el consejero, a raíz de que la Comunidad de Madrid procediera ayer lunes al cierre cautelar de la citada clínica, situada en el número 41 de la calle de Zurbano (en el distrito de Chamberí), por "grave riesgo" para la salud de sus pacientes.

Güemes ha señalado que esta decisión de la Comunidad "no tiene nada que ver" con la investigación que se realiza en las clínicas abortistas de Barcelona pues, según ha dicho, lo que allí ocurría se conoció a través de un programa de televisión de cámara oculta, mientras que las irregularidades de la clínica de Zurbano se han desvelado en una inspección de Sanidad.

Ha insistido en que todos los centros sanitarios autorizados de la Comunidad de Madrid se someten al Plan de Inspecciones regional para garantizar que cumplen la normativa "sea cual sea la patología que traten o la actividad que realicen". En el caso concreto del Instituto CB Médical de Madrid, el consejero ha confirmado que se han "detectado irregularidades suficientes" para proceder al cierre cautelar de actividad y se ha puesto el asunto "en manos de la autoridad competente".

Mientras tanto, ha asegurado que no se puede afirmar que la "mala praxis" con que se realizaban las interrupciones de embarazo en las clínicas del grupo en Barcelona se repetían en la de Madrid, por lo que ha insistido en que se debe "dejar trabajar" a los inspectores de la Comunidad para que averigüen estos extremos.