El Ministerio de Sanidad lanzó ayer una campaña muy suave, pero con ironía y humor negro, para concienciar a la población de los riesgos del tabaco y evitar la incorporación de los jóvenes al hábito. La ministra Elena Salgado aprovechó la presentación para recordar que la prohibición total de fumar en los espacios públicos y centros de trabajo entrará en vigor el 1 de enero del 2006.

Bajo el lema Gracias por no fumar , advierte en positivo de las ventajas de dar de lado al hábito. En los anuncios de televisión y radio sustituye el mensaje habitual con voz femenina de las máquinas expendedoras al despachar las cajetillas por otros más sarcásticos: "Su aliento más pestilente, gracias". "Sus pulmones más negros, gracias". "Sus 20 días menos de vida, gracias". "Los no fumadores más perjudicados, gracias", y "la salud de los que le rodean más afectada, gracias".

"El propósito no es hostigar a los fumadores, sino advertirles de que son una minoría, ya que dos tercios de la población no fuman, y de que los que fuman deben dejarlo", destacó Salgado. La ministra también subrayó que su departamento y todas las autoridades de la UE tienen claras las medidas para proteger a los "fumadores involuntarios", ayudar a la población fumadora a dejar el hábito y "favorecer la percepción social de que lo normal, lo sano, es no fumar y que respirar aire sin humo es un derecho de todos".

Salgado no descartó la idea de endurecer las campañas a lo largo del 2005 con medidas similares a las de otros países de la UE donde las cajetillas incluyen truculentas imágenes de cáncer de pulmón y otros estragos del tabaco.