Iré a buscar a todos los que todavía quedan allí hayan hecho lo que hayan hecho". Nicolas Sarkozy sorprendió ayer con esta declaración, referida a los seis franceses de Arca de Zoé que siguen detenidos en Chad, acusados de secuestro de menores y estafa. La frase forma parte del tira y afloja que Francia y Chad mantienen desde que el presidente francés viajó a Yamena para liberar a tres franceses y cuatro azafatas españolas.

Poco después, el ministro de Justicia chadiano, Albert Pahimi Padacké, dijo que no será el presidente francés quien decida en el asunto. La afirmación la reforzó el propio presidente del país africano, Idriss Déby: "No está planteado que la justicia chadiana se declare incompetente. La justicia se hará aquí". Sarkozy añadió que "el papel del jefe del Estado es el de hacerse cargo de todos los franceses, de los que hacen las cosas bien y de los que cometen errores, lo que le puede pasar a todo el mundo".

Esta nueva implicación personal en el caso la protagonizó Sarkozy en la localidad atlántica de Le Guilvinec, donde se presentó de improviso para solucionar el conflicto, incluido el bloqueo de puertos, que desde hace días mantienen los pescadores franceses en protesta por el aumento del precio del gasóleo. En Le Guilvinec, se enfrentó verbalmente a los pescadores que le silbaban e insultaban y les prometió mejoras. Defendió de nuevo su activismo y anunció su nueva visita a Chad.

La intención de Sarkozy de volver a Yamena podría ser una respuesta a unas duras declaraciones del ministro del Interior de Chad, Ahmat Mahamat Bachir, publicadas ayer en Le Parisien . "Los hechos han sido cometidos en Chad. Por eso, deben ser juzgados y condenados aquí". Bachir, sin embargo, defendió la inocencia de las azafatas y el auxiliar de vuelo españoles. Sobre el piloto y el copiloto, dijo, sin embargo, que "estaban al corriente de las intenciones de Children Rescue (nombre que adoptó la oenegé)". "No dudaron en falsificar documentos", añadió en referencia a la matrícula y al plan de vuelo, acusaciones que rechaza el abogado de los españoles, Jean-Bernard Padaré.

Padaré presentó ayer la petición de libertad provisional para el piloto, Agustín Rey; el copiloto, Sergio Muñoz, y el auxiliar de vuelo, Daniel González. El juez de Yamena tiene 10 días para decidir, plazo en el que la diplomacia española confía en que sean liberados. Según el secretario de Estado de Exteriores, Bernardino León, "hay información" que apunta a la salida de la cárcel de Yamena. Fue el propio León quien explicó que el lunes José Luis Rodríguez Zapatero, mantuvo una "positiva y clarificadora" conversación telefónica con su homólogo chadiano. Este, de acuerdo con la versión del secretario de Estado, "prometió hacer todo lo que esté en su mano".