La semana que hoy acaba y la que viene están siendo un calvario para los seis millones de españoles alérgicos al polen. Las abundantes lluvias de mayo y la subida de las temperaturas han concentrado en junio las reacciones alérgicas. Según datos de la Sociedad Española de Alergología e Inmunología Clínica (SEAIC), quedan en toda España al menos 10 días con concentraciones de pólenes superiores a 50 gramos por metro cúbico. A partir de este umbral, un 87% de los alérgicos reaccionan.
"La temporada pasada batió récords históricos con concentraciones de hasta 7.000 granos por metro cúbico de aire. Este año ha sido más benigna y corta, pero también bastante dura", explica Javier Subiza, coordinador del comité de Aerobiología de la SEAIC.
MUCHA LLUVIA Y POCO CALOR Las personas sensibles al polen se han visto aliviadas por la pluviosidad mantenida hasta final de mayo. "Pero la lluvia aumentó la vegetación y la polinización. Esto ha hecho que la sintomatología en Catalunya y la zona mediterránea haya sido más tardía de lo habitual. Las temperaturas suaves de ahora retrasan que las plantas se sequen y dejen de polinizar", dice Antonio Peláez, presidente de la SEAIC y jefe de Alergología del Hospital Clínico de Valencia.
Según los expertos, la principal fuente de polen alergénico en Catalunya, Valencia y Murcia es la parietaria, una familia de malezas presente principalmente en solares y paredes de las áreas costeras. "Este año también ha polinizado más tarde de lo habitual. Los síntomas de este tipo de alergia pueden ser confundidos con rinitis y asmas crónicos, sobre todo en pacientes que superan los 30 años", apunta Peláez.
El 19 de mayo ha sido en el 2004 el día de mayor concentración de pólenes de parietaria, 49 granos por metro cúbico. Pero, según las mediciones, todavía nos encontramos en un período
álgido. Con todo, los días pico de las terribles gramíneas fueron el
26 de mayo en Badajoz (571 granos por metro cúbico) y el 2 de junio en Toledo (658 granos por metro cúbico).
El norte de España también se está viendo inusualmente muy afectado por esta familia vegetal, que contiene unos 635 géneros y 9.000 especies, y es la cuarta más extensa después de fabáceas, orquidáceas y compuestas. Así, Vitoria registró el jueves pasado 247 granos por metro cúbico de aire, y Bilbao, 175.
Según fuentes del sector farmacéutico, la venta de antihistamínicos para combatir los efectos de la alergia se ha disparado en los últimos 20 días, sobre todo en zonas del interior. Las urgencias del Hospital Gregorio Marañón de Madrid y otros centros se colapsaron el lunes pasado, tras las numerosas tormentas, y fue necesario administrar suero y oxígeno a numerosos pacientes. "Las tormentas rompen los granos de polen, los hacen más alérgicos y más fáciles de inhalar", explicó un portavoz.
Los alergólogos han detectado este año un aumento de la sintomatología ocular, además de la rinitis que sufre el 90% de los afectados. Aseguran que han atendido a numerosos pacientes con conjuntivitis leve, mucho picor de ojos y lagrimeo.
"Es una peculiaridad de este año a la que no encontramos una explicación lógica. Quizá al ser el polen más tardío, puede que la contaminación...", apunta Antonio Peláez.
