Senegal aceptó ayer las explicaciones y garantías ofrecidas por el Gobierno español. La operación de repatriación de inmigrantes clandestinos desde las Canarias se reanudará, pero no inmediatamente. Este fue el resultado de más de dos horas de la reunión que mantuvieron el secretario de estado de Exteriores, Bernardino León, y el ministro del Interior senegalés, Ousmane Ngom, en Dakar.
El encuentro se produjo después de que Senegal suspendiese el jueves el plan de repatriaciones tras denunciar que un primer grupo de inmigrantes fueron esposados y embarcados con el falso anuncio de que viajaban a la Península.
Tras la reunión de ayer, León explicó que el Gobierno senegalés considera "suficientes y apropiadas" las aclaraciones españolas sobre el trato a los repatriados. Pero una vez zanjado el incidente, deberán afinarse las condiciones en las que se reanudarán los vuelos. Fuentes de Exteriores informaron de que España deberá proponer a las autoridades senegalesas un nuevo calendario.
Las mismas fuentes explicaron que ambos países profundizarán en la colaboración de otros aspectos, como la vigilancia de las costas senegalesas, los proyectos de desarrollo agrícola y la canalización de la inmigración legal.
Paralelamente, el Gobierno intentaba arrancar en Luxemburgo más colaboración de la UE para hacer frente a la inmigración clandestina. El secretario de estado de Interior, Antonio Camacho, calificó de "avance histórico" la decisión de que la Agencia Europea de Control de Fronteras Exteriores (Frontex) coordine un dispositivo de ayuda para Canarias.
