La española, Penélope Cruz, interpreta en el recién estrenado filme de Woody Alen, Vicky Cristina Barcelona , a María Elena, el personaje más excéntrico, histérico e histriónico de esta película rodada en Barcelona.

--¿Se divirtió en la película?

--Me divertí cuando leí el guión, pero mientras estuve preparando mi personaje, y hasta que vi la película meses después, en Cannes, sentí que estaba haciendo un drama.

--Interpreta a uno de los personajes más celebrados por la crítica.

--María Elena es muy inestable, se tortura mucho. No se entiende, ni a sí misma ni a los demás. Está desesperada, pero tampoco deja que la ayuden, yo quería entender cómo vive alguien atrapado en esa situación

--¿Improvisó?

--Intenté colarle a Woody algunas peleas desde diferentes perspectivas de María Elena, de manera que no fueran todas tan explosivas, y me dejaba hacerlo, pero en el rodaje me daba cuenta de que al final él siempre tenía razón.

--Explíqueme su primer encuentro con Woody Allen.

--Había escuchado muchas versiones de cómo era, y no quería creerme ninguna hasta que yo le conociera, aunque sí hubo gente en la que confío que me había dicho que, en el casting, se limitó a saludarles y a sacarles una polaroid.

--¿Y cómo fue?

--Nuestra reunión solo duró 40 segundos, que ya es mucho. Y conectamos. Nos reímos mucho.

--Y de ahí, a María Elena.

--Al mes siguiente me llamó y me dijo que le gustaría que hiciera el personaje. Me mandó el guión y ya no le volví a ver hasta que dijo "acción".

--¿Qué me recuerda del rodaje?

--No le gusta hacer muchas tomas. A veces solo hacíamos una, y a mí casi me daba un infarto. Y su estrategia no es inocente. Es decir, lo hace a propósito para crear un ritmo que mantenga a los actores en el presente. Así no nos deja tiempo para comernos el coco con lo que hacemos.

--¿Es despistado como parece?

--Es un director de orquestra. Tal es su precisión que no hace ni un plano de más. Puede ver la película entera en su cabeza, antes de rodarla. Es increíble el control que tiene.

--¿Para los actores, eso es bueno?

--Es una maravilla. Es saber que estás en las manos de un genio. Me pasa lo mismo con Pedro Almodóvar.

--¿Le regaló sus gafas?

--Yo le había dicho alguna vez que me encantaban, y el último día me las regaló. Fue todo un detalle.