EEUU compartía hasta ayer el triste privilegio de formar parte de la lista de países que en pleno siglo XXI vetan la entrada a los enfermos de sida junto a otro medio centenar de naciones y territorios, entre ellos Arabia Saudí, Siria o Libia que, según Naciones Unidas, aún mantienen alguna discriminación a la entrada, estancia y residencia de personas por padecer la enfermedad. Desde ayer también se han levantado las restricciones en Corea del Sur.