Ingeniosos, bienentencionados, cálidos, obscenos, de muy mal gusto, trascendentes, estimulantes, cursis, cultos y, casi siempre, retóricos fueron algunos de los incontables mensajes SMS que al acercarse la medianoche del 31 de diciembre empezaron a pedir paso en los más de 40 millones de móviles que hay activos en España.

Quien sabe si impulsada por alguna mente comercial (la sospecha se repite cada vez que se recibe uno), esta forma de felicitar el cambio de año es ya un poderoso fenómeno social en Occidente. Responde muy bien a lo que para algunos inmigrantes es la alegría con la que se gasta el dinero en Europa. Mientras millones de mensajes animaban la Nochevieja, un cayuco llegó a Gran Canaria coincidiendo con las campanadas. Iban 120 sin paleles , uno de ellos, muerto. Queda ahí el dato.

Los SMS de persistente tono sexual fueron los más abundantes, siguiendo la tradición del viejo chiste verde. "Festeja con champán y tu año será genial. Si es con uvas y buen vino, tu año será divino. Pero, si quieres un año estelar no te olvides de f...", este sería uno de los menos impublicables.

AMOR Y MAS AMOR Tras ellos, figuraron los que hablaban de amor, con buena intención pero peligrosamente cursis: "Abre la mano... espera...ahora puedes cerrarla. Póntela en la mejilla... Abrela... ¿Lo has notado Era un besito, para ti", decía uno, no el peor. "Que tengamos tiempo para mirar las estrellas, oler la tierra mojada, beber buen vino, escuchar a los amigos, compartir abrazos, soñar", fue otro.

La carpeta un punto empalagosa guardó este deseo: "Que en el 2007 tu rutina se convierta en sorpresa, los enfados en sonrisas y las tristezas en esperanza. Que tu bandera sea el trabajo y tu lenguaje la libertad". Y este, tan romántico: "Brindo por que el sol sea tu colega, la luna tu cómplice y la felicidad tu amiga".

En el capítulo buen rollo se archivaron recetas de todo tiempo: "Paz, amor, compasión, felicidad todo el año y no solo en estas fechas. ¡Que en todas nuestras acciones pongamos el corazón!", o de carga encomiable: "Se cambia de año, de aspecto, de objetivos, pero nunca de un verdadero amigo. Te quiere..."

CAMPAÑA Y MAL GUSTO Los hubo de total campaña electoral: "Llega el nuevo año y tendrás muy buenos propósitos: el gimnasio, dejar de fumar... ¡Perfecto! Te animo a hacer algo fácil: Hagamos que cambie Barcelona. Hagamos alcalde a Trías", directamente.

De franco mal gusto fue este: "Feliz Semana Santa de parte de la asociación de Alzheimer", seguido de cerca por este otro: "Hola, soy Sadam ¿Hacéis algo en Nochevieja? Es que estoy colgado". El expresidente de Irak motivó más mensajes, todos de similar categoría humana y nula gracia: "Es un momento para pensar en los demás: haced sitio a Sadam en la mesa que finalmente se ha quedado colgado".

Y qué decir de esta necrofilia: "Que la bendición de Dios descienda sobre vosotros y el Señor ilumine a un militar de alta graduación que de un golpe de Estado y vuelva nuestra gloriosa España a ser lo que era. Desde el cielo: Francisco Franco".

Entre los elaborados con pretensiones de crudeza literaria, pero rozando la cariñosa tontería, destacó este: "Ojalá las pulgas de mil camellos egipcios infecten el culo de quien intente joderte el 2007 y que sus brazos sean tan cortos que no pueda rascarse. Salud y suerte".

Y este: "Cuando un sueño se cumple, un pequeño duende esboza una sonrisa: que el 2007 sea el tiempo en que tu duende aprenda a sonreir. Y si no sonríe con su tierna carita, dale unas buenas hostias en los morros hasta que lo haga, que al fin y al cabo es el único favor de mierda que le pides en todo el año".

LOS INGENIOSOS El ingenio corto y claro dio ésto de sí: "Feliz año Bond. Feliz 007", este otro, algo mejorable: "La riqueza de las personas son sus amigos, gracias por formar parte de mi fortuna", o dos claramente cursis: "Si estas fiestas ves a un señor vestido de rojo bajando por tu chimenea y te mete en un saco, no te asustes: he pedido que mi regalo seas tú", seguido por: "Que la lluvia de la felicidad te pille con el paraguas roto, que te empape plenamente y que salpique a todos los que están a tu alrededor. ¡¡¡Feliz Navidad!!!"

Junto a estos deseos tan salpicados de negocio sector telefonía móvil, habría que citar los miles de mensajes en árabe y urdu (idioma de Pakistán) que anteayer también se llevó el viento.