El brote de gripe del cuartel de Hoyo de Manzanares toca a su fin. La ministra de Defensa, Carme Chacón, levantó ayer la orden de aislamiento y dio la de salida a los 340 soldados que permanecían en las instalaciones desde hacía 10 días. El cese de la cuarentena cobra especial relevancia al coincidir con la celebración del Día de las Fuerzas Armadas --en realidad dos jornadas, ayer y hoy--, que tiene como escenario principal Santander. El Ministerio de Sanidad mantiene la vigilancia de 23 militares de la academia sospechosos de portar el virus, y ha confirmado 29 casos de afectados en el cuartel y 13 fuera relacionados con él.

La suspensión de las restricciones se produjo tras dos días seguidos sin que se haya registrado ningún caso nuevo de gripe en el acuartelamiento, por lo que los servicios médicos consideran que el brote ha remitido. Entre los últimos contagiados figuran dos ciudadanas de Córdoba, un hombre que vive en León y un militar destinado en el Líbano que asistió a un curso en el acuartelamiento y viajó desde España hace 8 días.

Antes de dejar el cuartel, se celebró en el recinto un acto de jura de bandera, presidido por Chacón, en el que participaron todos los alumnos y mandos de la academia y que había sido retrasado por la aparición del brote.

En su segunda visita al centro castrense desde la aparición del brote, la ministra subrayó la "actitud ejemplar" de los alumnos "en todo momento" y dedicó unas palabras a los familiares.

Un total de 459 militares fueron sometidos a un régimen de movilidad restringida tras detectarse el brote.