El pleno del Congreso de los Diputados aprobó ayer la ley de igualdad entre hombres y mujeres con el apoyo de todos los grupos parlamentarios a excepción del PP, que se abstuvo. El partido conservador justificó su decisión al decir que la igualdad debe llevarse a cabo tanto en las empresas como en la política "por convencimiento y no por imposición legal". La norma --que establece listas electorales paritarias, obliga a las empresas a negociar planes de igualdad y crea un permiso paternal-- tiene que pasar todavía por el Senado y regresar al Congreso para su aprobación definitiva. No entrará en vigor hasta el próximo mes de marzo.

A lo largo del debate, todos los grupos aplaudieron el texto, considerado como una de las medidas estrellas del Gobierno. La excepción fue el PP, que, incluso, lo calificó de inconstitucional.