El robot Spirit , que se posó en Marte el pasado día 3, podría empezará a caminar la noche del martes al miércoles, según avanzó ayer la NASA. El vehículo ha desplegado sus elementos, se ha puesto de pie y sus seis ruedas están operativas, precisó Jennifer Trosper, responsable de la misión en el Jet Propulsion Laboratory (JPL), el centro de la NASA en Pasadena. La agencia espacial está obrando con evidente prudencia, incluso lentitud, para evitar errores y afinar el lugar de exploración.

Uno de los airbags de aterrizaje no se replegó por completo, lo que podría haber impedido el descenso del Spirit desde la plataforma en la que se encuentra, pero los técnicos ya tenían preparada una alternativa: dará una vuelta y bajará por una rampa lateral. Mientras, el robot sigue enviado imágenes de gran calidad, aunque lógicamente muy repetitivas, puesto que lo único que puede hacer es mover su periscopio.

Los científicos del Laboratorio de Propulsión a Chorro de la NASA, en Pasadena, indicaron que la sonda Spirit --una de las dos que la Agencia Espacial de EEUU enviará este año al Planeta Rojo-- completó la transformación mucho antes de lo previsto.