Un entrenador croata se suicidó después de denunciar la violencia en el fútbol regional y el supuesto acoso a su equipo, informó hoy la prensa local.

Indignado por el continuo maltrato a su equipo, el Rabac, de la liga regional de Istria, Nedim Kovacevic se mató ayer saltando del tercer piso de su casa en la localidad de Rabac, en la que vivía.

El pasado domingo dirigió su último encuentro en el terreno del Sveti Petar, a cuyo final sufrió una agresión por parte del público. El lunes dio una entrevista en una radio regional, expresando su disgusto ante los acontecimientos en el fútbol regional, la violencia impune y la supuesta campaña contra el Rabac para hacerlo descender.

"Los culpables son los dirigentes del fútbol istrio. No me importa como me van a castigar por lo que digo, ya que me retiro de fútbol", manifestó en la entrevista.

Trágicamente, dos días mas tarde acabó con su vida a los 55 años, dejando atrás a su mujer y un hijo.