Un experto del Instituto Pasteur de París, Jean-Claude Manuguerra, ha alertado del riesgo de que el virus de la neumonía asiática "perfeccione su mecanismo de transmisión" a medida que se disemine entre la población, con lo que sería cada vez más contagioso. El virólogo, cuyo laboratorio forma parte de la red que ha identificado el coronavirus que causa la infección, considera "inquietante" la progresión del mal, que ha matado ya a 223 personas.

"Estamos en una fase epidémica ascendente, difícilmente controlable", indicó Manuguerra en declaraciones a Le Monde. El experto cree "poco tranquilizadores" los casos detectados en Canadá, ya que demuestran que en ese país el virus "se implanta sin dificultad".

El virólogo, que tras la alerta de la Organización Mundial de la Salud (OMS) viajó a Hanoi para visitar el hospital donde se han registrado varias muertes, aventuró que "el riesgo de diseminación planetaria" de la enfermedad "dependerá de su evolución en China". El científico lamentó que ese país ocultara los primeros casos, detectados a finales del 2002. "Entonces, tal vez hubiera sido posible impedir su expansión", añadió.

EL FUTURO

La posibilidad de que la enfermedad se convierta en endémica --incurable y recurrente-- no es descartable, dijo el virólogo, que precisó que todo dependerá de cómo reaccione el organismo de los afectados: "Si su sistema inmunitario responde con fuerza a la infección y el virus no evoluciona genéticamente, es posible que estas personas queden inmunizadas. En ese caso, estarían protegidas ante epidemias futuras de esta misma neumonía".

Manuguerra se mostró inquieto ante la "multiplicación y el desarrollo rápido de los focos de contagio" detectados. Aunque admitió que, en relación con la población mundial, el número de infectados es muy bajo, "está claro que en China, y en especial en Hong Kong, la epidemia es de expansión rápida", y que la tasa de mortalidad, aunque no es elevada, "no es en absoluto desdeñable", ya que se trata de un virus respiratorio, habitualmente menos letales.

En España, mientras tanto, el Ministerio de Sanidad amplió ayer el listado de zonas a las que recomienda no viajar, incluyendo ahora Pekín y Mongolia interior. Los lugares a los que el Gobierno aconseja no ir son, además de los dos indicados, Hong Kong, Cantón, Shanxi y Taiwan (China), Hanoi (Vietnam), Toronto (Canadá) y Singapur.

La decisión fue acordada en una reunión de la comisión de seguimiento de la enfermedad, que aprobó también dos protocolos. Uno de ellos se dirige a las personas que decidan viajar a zonas afectadas con motivo de adopciones de niños y el otro afecta a actuaciones de alerta en aeropuertos.