Un terremoto con epicentro entre las pedanías de Zarzilla de Ramos y La Paca (Lorca), de una magnitud de 4,6 en la escala Richter, se registró hoy a las nueve menos veinte y fue sentido en el Este de Andalucía y Sur de Castilla-La Mancha y de la Comunidad Valenciana, sin que produjese daños personales.

El Instituto Geográfico Nacional ha registrado una réplica diez minutos después de las nueve de la mañana, que pudo ser sentido, no así las otras veinticinco réplicas, por debajo de esa magnitud.

El movimiento telúrico, que pudo sentirse con una intensidad IV, es el más fuerte de los últimos años en España y el segundo más fuerte de la Región de Murcia, después del ocurrido en Mula el 2 de febrero del año 1999 (4,8 Richter).

A los propietarios de las viviendas más afectadas de Zarzilla de Ramos y de La Paca se les ofreció alojarse en el albergue de Coy, si bien algunos vecinos anunciaron que podrían pasar la noche con sus familiares.

Al lugar del seísmo acudieron, entre otros, el presidente de Murcia, Ramón Luis Valcárcel; el delegado del Gobierno, Angel González; el consejero de Obras Públicas, Joaquín Bascuñana; el director provincial de Protección Civil, Guillermo Insa, y el alcalde de Lorca, Miguel Navarro.

El director regional de Urbanismo, Manuel Alfonso Guerrero, explicó que aparejadores, ingenieros y arquitectos visitan las casas para hacer una primera evaluación de las viviendas que hay que desalojar y, posteriormente, elaborar un inventario de daños.

Técnicos de Protección Civil, agentes de la Guardia Civil y Bomberos trabajan en la zona para, entre otras labores, asegurar las viviendas afectadas y acordonar las zonas por el riesgo que supone el posible desplome de tejas y cornisas.

Un vecino de Zarcilla, un pueblo de algo más de mil habitantes, dijo que allí "se sintió muy fuerte" el terremoto, que las personas salieron a la calle asustadas, y que el movimiento tiró muebles, cuadros y lámparas, mientras que la fachada de alguna vivienda presentaba grietas.

El consejero de Obras Públicas indicó que "hay tejas y escombros en la calle que pueden dar aún más sensación de alarma, pero hay que reconocer que en algunas viviendas el seísmo ha hecho mucho daño".