Los trabajadores de Anesvad exigieron hoy la dimisión del presidente de la ONG, José Luis Gamarra, encarcelado por apropiación indebida de fondos, ya que "el daño contra la organización es irreparable", y afirmaron que seguirán trabajando con "profesionalidad y transparencia" para "recuperar la confianza" de sus socios y colaboradores.

La mitad de los cerca de cincuenta trabajadores que tiene Anesvad comparecieron este mediodía ante los medios en Bilbao para leer un comunicado en el que se desvincularon las actuaciones "ilícitas" de Gamarra y confirmaron su compromiso con los proyectos que tienen en marcha en países en vías de desarrollo.

El texto comienza "lanzando un mensaje de responsabilidad y de ilusión" para tratar de superar "esta situación tan grave" de la que se sienten "víctimas", por lo que dijeron que colaborarán con la Justicia hasta aclarar lo sucedido. Añade que "respetando en todo momento la presunción de inocencia y teniendo en cuenta que no existe ninguna imputación formal contra José Luis Gamarra, nos vemos en la obligación de pedir su dimisión dentro de la ONGD, ya que, independientemente del fallo final del juez, el daño contra la organización es irreparable". Anunciaron la incorporación a la Junta Rectora "de personas externas a la ONGD con amplia experiencia en cooperación al desarrollo", además de otros cambios internos, "con el fin de mejorar la transparencia" de la entidad y tratar de recuperar la confianza de los socios y los colaboradores de Anesvad, del resto de la sociedad y del sector asociativo.

Lamentaron que "muchas personas se sientan decepcionadas y desilusionadas tras los acontecimientos que estamos sufriendo" y pidieron que esta investigación no haga "perder la confianza en las ONGDs, en el importante papel que juegan en nuestra sociedad y en los resultados de sus acciones que hacen que millones de personas de los países del Sur mejoren sus condiciones de vida y puedan acceder a sus derechos fundamentales".

Los trabajadores de Anesvad reafirmaron su intención de "continuar" su labor en los proyectos que tratan de mejorar la calidad de vida de la población de los 25 países más desfavorecidos de América Latina, Asia y África, donde desarrollan más de un centenar de proyectos sobre todo sanitarios y de lucha contra la prostitución infantil. Agradecieron el apoyo recibido de socios y de otras organizaciones "en estos momentos tan duros".