España es uno de los países europeos con más kilómetros de autovías, pero su mantenimiento, debido a los rigores de la crisis, puede verse muy mermado. Por eso, la Asociación Española de la Carretera (AEC) exige a los partidos que estudien fórmulas de financiación, una de las cuales es el denominado pago por uso, que practica Portugal y consiste en que los automovilistas que utilicen más las vías abonen cierta cantidad que se destinará íntegramente a la conservación de las carreteras. Ayer, la AEC recibió el apoyo del director general de Tráfico, Pere Navarro, que abrió la puerta a estudiar la implantación de un canon como el portugués.
En un foro de debate organizado por el Real Automóvil Club de Catalunya (RACC) en Madrid, Navarro explicó que "las grandes carreteras ya están hechas" y ahora toca invertir en su gestión y mantenimiento. "No podemos permitirnos el lujo de que se nos estropeen", señaló, y ante la posibilidad de que no haya suficiente presupuesto, se mostró dispuesto a "buscar fórmulas de financiación". Navarro se refirió a la propuesta de algunos países europeos de implantar el pago por uso en viajes de más de 100 kilómetros. "Vamos a ver qué podemos hacer porque somos conscientes de que el reto en estos momentos es la conservación", añadió.
AL IGUAL QUE EL AGUA Fuentes de la DGT explicaron que la idea aún no ha sido madurada ni debatida con otros departamentos gubernamentales, pero básicamente consiste en que, al igual que ocurre con el consumo del agua, todos los españoles paguen por la construcción de las infraestructuras y después se abone en función del uso.
La Asociación Española de la Carretera propone crear un bono de movilidad que permita circular gratis los primeros 15.000 kilómetros al año (100.000 kilómetros para el transporte profesional) y después se abone una cantidad que varíe en función de la franja horaria o la carretera utilizada. Los kilómetros nocturnos serían gratuitos y se pagará más en las hora punta y las carreteras congestionadas.
No hay duda que en estos momentos de crisis peaje sería impopular. Según la AEC, representantes de diferentes partidos se han mostrado en principio partidarios de la creación del canon.
En la misma conferencia, Pere Navarro advirtió ayer de que suprimir el límite de 80 kilómetros por hora en las entradas a Barcelona conllevaría un aumento de las víctimas mortales. "Ojo con suprimirlo drásticamente porque va a haber más accidentes y alguien tendrá que asumir la responsabilidad", avisó ayer al presidente, Artur Mas, cuyo Gobierno decidirá la semana que viene qué hacer con el tope. El director de la DGT se mostró de acuerdo en "revisar o flexibilizar" el límite.
