La Dirección General de Tráfico (DGT) está estudiando la posibilidad de implantar la obligación de que los ciudadanos deban aprobar un examen teórico para poder renovar el permiso de conducir, que se uniría al psicotécnico, la única prueba obligatoria actualmente. De momento, se trata solo de una idea que los técnicos de la dirección general están barajando. Pero, de salir adelante, miles de conductores tendrán que refrescar los conocimientos que adquirieron cuando fueron a la autoescuela y ponerse al día en cuestiones como las nuevas señales o mecánica para poder mantener su permiso de conducir en vigor.

La directora general de la DGT, María Seguí, ha esbozado esta iniciativa al referirse, el pasado fin de semana en Toledo y ayer en Madrid, a la necesidad de que los conductores tengan un a formación continua y permanente, que podría ser evaluada". Pero no concretó "dónde, cómo y sobre qué" en espera de que el Ministerio del Interior tome una decisión definitiva. También eludió concretar si esas medidas pasarían por un examen al estilo tradicional, pero sí reconoció que el mejor momento para esa actualización es al renovar el permiso de conducir.

REVALIDA TEORICA Seguí afirmó en la convención anual de autoescuelas celebrada en Toledo que la prueba sería una especie de "reválida teórica" para que "los conductores estén en constante evaluación para mejorar la seguridad vial y reducir la siniestralidad mortal en las carreteras". "Yo no me apeo de esta idea, porque la formación y la actualización de los conocimientos son clave para reducir los accidentes en la carretera", aseguró la responsable de la DGT. Ayer explicó que el problema en estos momentos acerca de la movilidad y seguridad vial lo es en personas que hace tiempo que conducen. "No es un problema de gente joven", apostilló.

RECAUDACION ELEVADA "Es un tema de estudio más sobre la mesa. De momento a corto plazo no se va a hacer nada", subrayaron fuentes de la DGT. Ni Seguí ni su departamento aclararon si el hipotético examen teórico para renovar el permiso de conducir en el futuro sería gratuito o supondría también el pago de una tasa por parte del conductor. En el caso de que hubiera que realizar un desembolso adicional, la cantidad de dinero que recaudaría la dirección general por este concepto sería cuantiosa, ya que cada año, según cifras del 2012, más de tres millones de conductores españoles tienen que renovar su carnet.

El proyecto de crear este examen de reválida, que generó en la convenció de Toledo reacciones a favor y en contra entre los representantes de las autoescuelas, serviría para "tomarse más en serio" la formación de los conductores, porque, según Seguí, "aunque todos hablamos como si fuéramos expertos, en realidad hay materias sobre las que avanzar y mejorar".

La DGT resaltó que la necesidad de mejorar la formación de los conductores más antiguos nace de que el fallecido tipo en un accidente es un varón de 46 años, que sufre el siniestro entre las 8 y las 20 horas(en horario laboral) y de lunes a viernes. Por tanto, hace al menos 20 años que conduce y a lo mejor, según Seguí, en su momento no había tanta formación en seguridad vial, así como infraestructuras y automóviles como los actuales".