Los cuatro reclusos que han mantenido retenidos durante doce horas a tres funcionarios de prisiones en la cárcel de Picassent serán trasladados con carácter de urgencia a otro centro penitenciario, ha anunciado la directora general de Instituciones Penitenciarias, Mercedes Gallizo. En declaraciones a los periodistas y acompañada por el delegado del Gobierno en la Comunitat Valenciana, Antoni Bernabé, Gallizo ha explicado que para solucionar el suceso, que ha finalizado tras la liberación del tercer y último rehén poco después de las seis de la mañana, no ha sido necesario emplear la fuerza.
Asimismo, ha apuntado que a los cuatro internos amotinados se les han intervenido algunos "pinchos" y objetos punzantes, con los que han amenazado a los funcionarios secuestrados, así como que aún se desconocen las razones que les ha llevado a protagonizar este suceso, localizado en el módulo de presos conflictivos de Picassent y que no ha causado daños personales. Según Gallizo, desde ayer por la tarde se ha producido "un proceso largo de negociación" donde la prioridad ha sido, "en todo momento, salvaguardar la integridad de los funcionarios", que se encuentran bien de salud tras los exámenes médicos de urgencia a los que han sido sometidos tras sus respectivas liberaciones.
En ese proceso negociador han participado miembros de la unidad de apoyo especializada de la Guardia Civil y la juez de Instrucción de Picassent. Para Bernabé, los tres funcionarios retenidos han demostrado "una gran entereza" y han podido colaborar "desde dentro" para resolver la situación.
Durante todo el tiempo que ha durado el secuestro, los internos no han presentado ninguna reivindicación, y respecto a las pastillas tranquilizantes que habían solicitado, finalmente no se les ha suministrado al considerarlo inoportuno los servicios médicos de la prisión por el riesgo que conllevaba. Gallizo ha insistido en la normalidad que ha habido en el resto de la prisión durante el suceso, así como en la "gran profesionalidad y entrega" mostrada por los funcionarios de Instituciones Penitenciarias.
"Es un orgullo" que España cuente con unos profesionales de su valía, según la directora general, quien ha destacado que el "final feliz" alcanzado esta mañana demuestra que "nuestro sistema funciona y está preparado para problemas como éste". Tras anunciar que se ha abierto ya una investigación para conocer con detalle los hechos y la responsabilidad de los internos involucrados en ellos, ha señalado que el secuestro es "una de las cosas más terribles que pueden pasar en una prisión".
Las fuerzas especiales de seguridad, los bomberos y las ambulancias desplazadas hasta la prisión de Picassent desde la tarde de ayer han abandonado ya las instalaciones penitenciarias.
