El Juzgado de lo Penal número 1 de Tarragona ha condenado a tres años y tres meses de cárcel a Eduard P. F., de 28 años, que el 16 de mayo del 2004 arrolló con su coche a Francisco Javier P. G., un ciclista que pedaleaba con un compañero por la comarcal C-241.

El fallo establece que el conductor se comportó temerariamente y despreció el riesgo que entrañaba ponerse al volante tras ir de fiesta y haber bebido alcohol en abundancia. Tanto que, cuando fue localizado tras huir del lugar, los agentes apreciaron que hablaba de forma "pastosa, titubeante e incoherente" y que "no podía introducir la boquilla en el etilómetro, no coordinaba los movimientos y no se tenía en pie". Y eso que eran las once, tres horas después del accidente.