Aunque todavía no se sabe cuándo estará lista la vacuna contra la nueva gripe, el comité de seguridad sanitaria de la UE propuso ayer que tengan prioridad para ser inoculados los enfermos crónicos mayores de 6 meses, las embarazadas y el personal sanitario. En el primer grupo se incluyen las personas que sufren afecciones cardiovasculares o respiratorias crónicas y con inmunodefiencia congénita o adquirida. "Se debe empezar por quienes están aquejados por los síntomas más severos", apunta.
La propuesta del comité, formado por expertos de los 27 países, es coherente con la de otros organismos asesores, como el Centro Europeo de Control de Enfermedades o la OMS, que a primeros de octubre fijará con precisión los grupos de riesgo. No obstante, los expertos dejaron claro que su recomendación no es de obligado cumplimiento y que cada Estado es competente para desarrollar su estrategia.
MENORES DE 14 AÑOS "La UE recomienda y nosotros decidiremos", coincidieron fuentes del Ministerio de Sanidad, al tiempo que recordaron que la medida será adoptada en el Consejo Interterritorial de Salud el próximo día 31. El departamento que dirige Trinidad Jiménez también baraja incluir entre los prioritarios a los menores de 14 años y a los trabajadores de servicios esenciales básicos (policías, bomberos, funcionarios de prisiones). No obstante, Sanidad prevé que la vacunación "no será obligatoria en términos legales" para este personal, según el secretario general, José Martínez Olmos.
El número dos de Sanidad rebatió la propuesta de la portavoz del PP, Ana Pastor, de que se dé permiso a las profesoras embarazadas hasta que llegue la vacuna, se inocule a la mayoría de la población y se devuelvan a las farmacias los antivirales retirados en abril. "No hay fundamento para que las embarazas no vayan al colegio. Pueden ir al supermercado y contagiarse", dijo.
El coordinador del registro de la Sociedad Europea de Medicina de Cuidados Intensivos (ESICM), Jordi Rello, advirtió, sin embargo, de que los hospitales españoles deberían duplicar o triplicar el espacio de las ucis para afrontar el previsible aumento de los ingresos.
