El Parlamento Europeo dio ayer la aprobación definitiva al nuevo reglamento de la Unión Europea (UE) que reduce las horas de conducción a los chóferes de camiones y autobuses y establece unos descansos obligatorios más largos para evitar los abusos laborales y prevenir los accidentes en carretera.

Los eurodiputados españoles del grupo popular votaron en contra de la nueva legislación, porque consideran que perjudicará los intereses de las empresas de transporte de larga distancia.

El grupo socialista, por el contrario, respaldó la propuesta por considerarla equilibrada.

La nueva normativa europea, que entrará en vigor en abril del 2007, establece un descanso diario obligatorio de al menos nueve horas (en lugar de las ocho actualmente en vigor) y un tiempo de reposo obligatorio de de al menos 45 horas consecutivas cada dos semanas.

El nuevo reglamento, que se aplicará a los conductores profesionales de vehículos de más de 3,5 toneladas, fija con claridad un límite de 56 horas de conducción máxima a la semana.