El Vaticano estudia una nueva normativa para que los hijos de sacerdotes que viven en concubinato (sin estar casados) con una mujer puedan llevar su apellido y heredar sus bienes. Al menos, sus bienes personales, porque los derivados de los "beneficios eclesiásticos" seguirán en manos de la Iglesia.
REPORTAJE EN LA STAMPA Así lo desveló ayer el diario italiano La Stampa en un reportaje en el que se destacaba que cada vez hay más casos de curas con hijos. La Congregación del Clero, que preside el cardenal brasileño Claudio Hummes, celebró hace varias semanas unas reuniones para tratar el espinoso asunto, que afecta especialmente a América Latina y a Austria. El reportaje de La Stampa deja claro que los reconocimientos de paternidad a través del ADN pueden suponer una "avalancha" de procedimientos judiciales, algo que podría terminar en "una multiplicación de causas millonarias", como las ocurridas en EEUU por los abusos sexuales a menores cometidos por sacerdotes.
Según el diario italiano, el Vaticano está pensando en la posibilidad de un "contrato civil" que permita que el hijo herede los bienes personales y lleve el apellido de su padre-sacerdote mientras este puede continuar con su labor eclesiástica.
LOS RIESGOS DE FACEBOOK No fue la única noticia sobre la Iglesia católica que ayer se hizo pública. El primado en Inglaterra y Gales, el arzobispo Vicent Nichols, alertó de que las redes sociales como Facebook implican muchos riesgos para los jóvenes, incluido el suicidio. Y todo porque, añadió, ese tipo de foros fomenta las relaciones "transitorias".
"Los jóvenes se entregan a una amistad. Entonces, esta se derrumba y ellos quedan desolados. Y eso es un factor muy importante de suicidio", dijo el arzobispo.
