Los dos vigilantes de la empresa Orma asesinados a tiros por un excompañero el lunes en el Palacio de las Telecomunicaciones ecarecían del título necesario para ejercer. Tanto el homicida, que usó su escopeta de caza y se quitó la vida tras el suceso, como la tercera vigilante herida sí estaban habilitados por el Ministerio del Interior, según la Delegación del Gobierno.

Tras conocer los hechos, la Brigada de Seguridad Ciudadana abrió un expediente a Orma por una posible infracción grave de la norma de seguridad privada. Sin embargo, la firma no ofreció ayer ninguna explicación sobre la falta de titulación de los dos fallecidos, informa Efe.

La ley obliga a los aspirantes a vigilantes privados a realizar un curso de 180 horas en un centro homologado por el Ministerio del Interior. Entre otras cosas, los alumnos aprenden a manejar armas, informática, primeros auxilios y prevención de riesgos laborales. Una vez terminado el curso, hay que superar con éxito dos pruebas: una física y otra teórica. Sólo entonces, pueden recibir la tarjeta profesional expedida por Interior que les capacita para trabajar en el sector de la seguridad privada.