El abogado Joan Vives Rodríguez de Hinojosa (hijo) declaró ayer ante el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña que sólo fue "un convidado de piedra" en la trama de sobornos articulada en torno al exjuez Lluís Pascual Estevill y el letrado Joan Piqué.

La fiscalía, que no ha presentado cargos contra él, también cree que su participación en el caso Macosa no fue delictiva, pero no así la acusación popular, que pide que sea condenado a seis años de cárcel por cohecho, y alguna de las acusaciones particulares, que solicitan para él hasta doce años de prisión por cohecho, detención ilegal y estafa.

En su declaración, Vives Rodríguez de Hinojosa ha explicado que sólo fue a una reunión que se celebró en el despacho de su padre --cuyo delicado estado de salud le incapacita para ser juzgado en esta causa-- y en la que también estaban presentes Joan Piqué Vidal, y varios directivos de Macosa.

El objetivo de dicha reunión era decidir cual era la cantidad que esos ejecutivos debían abonar al ahora exmagistrado Pascual Estevill para que los administradores de la sociedad Eduardo Santos y Federico Albiñana no acabaran definitivamente en prisión.