Pedir perdón nunca está de más.

Otra forma de verlo, sin embargo, es como una disculpa. Y es que no hace mucho que la operadora subía el coste de sus tarifas convergentes, como ya habían hecho Movistar y Orange. Comparada con las otras dos, Vodafone se lleva un punto a favor ya que, habiendo sido la última en aumentar sus precios, es también la primera que tiene un gesto cariñoso con los clientes que los han sufrido.

Este gesto viene en la forma de llamadas gratuitas y datos móviles ilimitados durante todo el 14 de febrero, desde las 00:00 hasta las 23:59, para que los clientes que se beneficien de esta promoción puedan compartir su amor con el resto del mundo como prefieran, ya sea subiendo fotos y actualizaciones a sus redes sociales, llamando a sus seres queridos, colgándose del teléfono un par de horas con sus parejas o viendo videos de gatitos hasta que no puedan más.

Es cierto que con la subida de precios llegaban algunas mejoras, pero incluso siendo así pagar más no es plato de buen gusto para nadie, menos aún en los tiempos que corren.

Vivir puede ser complicado, pero amar es sencillo

Cuando alguien te quiere hace lo posible por no ponerte trabas innecesarias, y Vodafone parece estar haciendo un esfuerzo para que sus clientes se sientan queridos sin demasiados trámites. Basta con acceder a esta página de activación de Vodafone para aprovechar esta oferta; tan fácil como eso, sin introducir códigos de confirmación ni preocuparse por desactivarla, pues cuando termine el día lo hará de forma automática, garantizando que no habrá cargos inesperados que agrien una ocasión especial. Ambos regalos forman un mismo “pack”, por lo que se activarán los dos en el mismo paso, como si abriéramos un paquete. Aunque no podemos olvidarnos de abrirlo, pues la promoción no se activa por sí misma y los clientes que no hagan caso a esa caja con lacitos podrían quedarse sin su regalo.

Abusar tampoco es bueno, primero porque no hay nada que arruine más San Valentín que una persona tan melosa que terminamos quedándonos pegados a ella. Entre beso y beso no es mala idea parar unos segundos a tomar aire, como en este caso, porque ya sabemos lo que ocurre cuando la red telefónica se pringa: se congestiona y empieza a dar problemas. En el Día de los Enamorados la política de uso responsable, al igual que la normativa sobre escándalos públicos, continúa vigente y es bueno recordarlo.

Un regalo diferente para cada relación

Eso sí, hay que aclarar que esta oferta está destinada a todos los clientes de contrato, pero no a los de prepago. Tampoco es que se hayan olvidado de ellos, que podrían considerar que recibieron un regalo adelantado el 5 de febrero, día desde el cual se les ofrecen varias promociones de contratación.

A simple vista puede parecer que Vodafone quiere más a los clientes de contrato que a los prepago, aunque es cierto que se trata de relaciones distintas y ya se sabe que mirando como son los regalos a menudo podemos hacernos una idea de lo afianzada que está nuestra relación. No es lo mismo que te regalen la edición coleccionista de esa serie que tanto te gusta a que te regalen un par de calcetines, pero por lo menos tendrás los pies calentitos, y eso con este tiempo se agradece.

El amor no se acaba el 15 de febrero

Ciertamente, Vodafone no solo tiene ofertas para el Día del Amor. Mucha gente celebra en pareja este día, pero hay otras muchas formas de querer. Y para esas formas de querer también hay promociones que incluyen servicios para toda la familia, como dos líneas con voz y datos compartidos, televisión por fibra y la posibilidad de hasta 3 líneas adicionales, o todos los canales que ofrece Vodafone TV Total con HBO España incluido, lo que sin duda seducirá a más de uno. Los enamorados del fútbol también tienen su reclamo con una oferta que incluye LaLiga Santander, LaLiga 1|2|3, la Copa del Rey y más.

Para quienes prefieran hacerse un regalo a sí mismos, o a una persona en especial, está la oferta del Samsung Galaxy Note 8, con el que además de otras cosas podremos hacer fotos de infarto, ya sea en familia, en pareja, en solitario o abrazando al perro mientras intentamos convencerle de que mire a cámara aunque sea por unos segundos.