El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, aseguró ayer que España será dentro de tres años el primer país del mundo en trenes de alta velocidad (AVE), por delante de estados tan punteros como Japón y Francia. Precisó que contarán en el 2010 con 2.230 kilómetros de vía, mientras que los japoneses (2.090 kilómetros) y los franceses (1.893) estarán por debajo.

No obstante, Francia cuenta con la ventaja de disponer de una red ferroviaria convencional que permite a los trenes alcanzar fácilmente velocidades cercanas a los 200 kilómetros por hora, lo que les aproxima mucho a los AVE. Además, sus convoyes pueden circular indistintamente por las vías de alta velocidad y las tradicionales.

Zapatero estrenó ayer el nuevo AVE de la serie 103 con un viaje relámpago entre Madrid y Villaseca de la Sagra (Toledo). El tren, que cubrirá la línea Madrid-Barcelona, será el más rápido de la compañía, con una velocidad punta de 350 k/h.

Aprovechó para hacer un balance triunfalista del Plan Estratégico de Infraestructuras y Transporte 2005-2020. Imbuido de ese espíritu, proclamó que en el 2010 España tendrá los dos aeropuertos hub (centros de distribución internacional) con mayor capacidad disponible de Europa: Madrid y Barcelona.