El Ayuntamiento de Mérida establecerá un protocolo de actuación para que los menores denunciados por actos vandálicos y daños al patrimonio, entre otras infracciones, realicen trabajos al servicio de la comunidad.

Aunque las ordenanzas municipales ya contemplan esta posibilidad, se precisa de un protocolo de actuación que regule dichos trabajos, han informado hoy fuentes municipales.

El objetivo de esta medida es que los menores denunciados, la mayoría de ellos reincidentes, sean conocedores reales de las consecuencias de su mala acción.

Como este tipo de infracciones comportan una sanción monetaria, los padres de los menores pagan la sanción económica, pero estos últimos "no son conocedores de las consecuencias de su mala acción".

La realización de servicios a la comunidad se lleva a cabo desde el Ayuntamiento desde hace mucho tiempo, pero solo en los casos de penados por los Juzgados y Tribunales de Justicia.

El objetivo del consistorio es que los menores denunciados adquieran "conciencia cívica", que entiendan lo que implica vivir en sociedad, que aprendan a amar y cuidar lo que es de todos y, como no, a su ciudad, "Mérida Patrimonio de la Humanidad, con todo lo que eso implica".