TVE se aferra a uno de los espacios de ficción que mejor le funciona: Amar en tiempos revueltos no se tomará vacaciones. Mientras la cadena emite los últimos capítulos de la tercera temporada de esta serie que cada tarde atrae a dos millones y medio de espectadores, la productora Diagonal TV (La señora ) ha iniciado la grabación de la siguiente tanda, que llegará a la pantalla en septiembre.

Nuevos rostros, inéditas tramas, decorados de estreno y más personajes al servicio de una descripción costumbrista de la España de posguerra, que en su próxima temporada alcanzará la década de los 50. Al plantel coral de la serie se incorpora ahora una decena de nuevos actores, entre los que hay habituales del escenario, como Manuel Bandera, Cristina de Inza y Clara Sanchís, y noveles, como Marina San José, hija de Ana Belén y Víctor Manuel. Pep Ferrer, Javier Collado y Miguel Ortiz son otros actores que también se suman al elenco, en el que siguen Nuria Fergó (Loli), Lola Marceli (Julieta) e Itziar Miranda (Manolita).

UNOS 400 ACTORES

Fieles al esquema que los guionistas adoptaron en su segunda entrega, diferentes tramas familiares se solapan, cediéndose entre sí el protagonismo. "Esto supone que cada temporada es casi como empezar la serie de nuevo, porque hay gente que desaparece y otra que llega", dice Joan Noguera, director del folletín, sobre el sistema de altas y bajas que ha hecho desfilar ya a 400 actores por la serie desde su estreno, en septiembre del 2005.

En la próxima temporada la atención girará en torno a la familia Rivas (Bandera, Sanchís y San José), unos comerciantes con fortuna, y a los García (Pep Ferrer, Pepa Pedroche, Carlota Olcina y Alex García), de perfil humilde. Aunque los lances amorosos serán el motor principal de la serie, habrá una misteriosa trama policial, con una epidemia de asesinatos de mujeres incluida.

El cambio de generación incidirá en asuntos más sociales y de la vida cotidiana, y no tanto en lo político como en otras entregas. Rodolf Sirera, coordinador de guionistas, desdice a quienes ven la serie marcada por el antifranquismo: "Mostramos distintos puntos de vista, pero es cierto que España no estaba en su mejor momento. Nuestro objetivo fue siempre contar la Historia a través de las pequeñas historias de la gente".